No quiero que estés solo…
Y si quieres abrazarme, puedo dejarte, puedo dejarme llevar
como si fuera la primera vez.
No quiero que me extrañes…
Y que pienses que estás solo, solamente porque no estoy,
solamente porque hay un espacio entre mi piel, el vacío y tu piel.
No quiero que me olvides…
Y que dejes ir lo que amaste de mí alguna vez, solamente
porque hay fantasmas que rondan por todas partes.
No quiero que se pierda el brillo de tus ojos…
Y que desaparezca eso que me atrajo hacia ti la primera vez
(y todas las otras veces). Eso que hasta hoy me hace quererte, que me impide
alejarme, que me lleva a encontrarte.
No quiero que me asfixies…
Y que sin pensarlo acabes con mis ganas de abrazarte para
siempre, solamente porque el ahora es más urgente.
No quiero que me mates…
Y que se acabe la esperanza, solamente porque no pudimos
esperar a que todo tenga sentido.
No quiero que me obligues a dejar de quererte…